Voluntad de Dios

Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.

Jeremías 29:11 – RVR1960

Creo que todo padre se encuentra en algún momento con la dificultad de como motivar a sus hijos. Especialmente en estos tiempos con la pandemia cuando las personas en general se pueden sentir un poco desmotivadas.

Viene a mi memoria un tiempo difícil en que no encontraba que hacer o decir para alentar a uno de mis hijos que se encontraba en un momento de desaliento en su vida. Y fue en ese preciso momento que empecé a escuchar este mensaje en la radio local de la cuidad. Y hoy quiero compartirlo con todos ustedes.

Había una mamá que llevaba todos los martes y jueves a su hijo a las clases de piano. Ella notaba que a pesar del tiempo que había pasado el no podía captar alguna de las notas que la maestra le enseñaba.

Ella se sentía frustrada ya que ella sabía que él niño no tenía ningún problema de aprendizaje y que todo iba bien con el. Pero a pesar que ella lo llevaba todo el tiempo a sus clases el niño seguía teniendo alguna dificultad.

Llegó el gran día que todos esperaba. Se trataba de un concierto que había preparado con mucho amor y esfuerzo la maestra en el año escolar. Todos los niños estaban contentos aunque un poco nerviosos pensando en cómo saldría el evento.

El auditorio estaba repleto lleno de padres, maestros, niños y público en general. Sube el telón y cada niño sale con una actitud de seguridad sabiendo que iban a poder demostrar el talento que tenia en los diferentes instrumentos que iban a tocar.

Empieza la música y de repente se escucha un poco de discrepancia entre las notas en la música que estaba tocando. De momento se pone de pie una de las madres al lado de uno de los niños y solo se escucha decir “ sigue tocando hijo, sigue tocando”

Esta puede ser una gran enseñanza para una persona que en algún momentos en la vida cuando por una razón o por otra no se siente en acorde con la vida, con algún trabajo o con alguna posición que le ha tocado ejercer en este momento.

No importa, aunque la audiencia no te apoye o sientes que no vas acorde con los demás y tu sabes que tus intenciones son rectas y buenas.

Sigue ese sueño, sigue esa carrera, sigue con el plan que Dios preparó para ti. Sigue, sigue, sigue.

Muchas bendiciones!